PowerCell recibe más pedidos de pilas de FC de Bosch
PowerCell Suecia ha recibido un nuevo pedido de Bosch por un valor equivalente a unos 900.000 euros para suministrar pilas de FC del tipo PowerCell S3 el próximo año. El acuerdo forma parte de un acuerdo conjunto de desarrollo y licencia firmado en 2019.
Desde abril de 2019, Bosch y PowerCell Sweden colaboran en el desarrollo, la producción y la comercialización de una pila para el sector automovilístico basada en la pila de combustible de electrolito polimérico (PEM) denominada PowerCell S3. En el marco del desarrollo y acuerdo de licencia celebrado en su momento, Bosch se aseguró el derecho a ofrecer la nueva versión de la pila de combustible S3 exclusivamente en automóviles, camiones y autobuses. El lanzamiento al mercado, dijo Bosch en su momento, estaba previsto para "2022 a más tardar". Mediante la combinación flexible de dos o más pilas, el dúo pretende cubrir una cartera de productos y servicios que va desde los turismos hasta los camiones pesados.
En abril de este año, PowerCell recibió un pedido similar de Bosch por valor de alrededor de un millón de euros. A finales de enero, el proveedor alemán anunció también que ya tiene el primer cliente para las pilas de combustible. Para los camiones de pila de combustible de la startup estadounidense Nikola, Bosch suministrará no sólo los ejes E, sino también todo el sistema de pila de combustible con tecnología de PowerCell. También habrá un primer cliente en el sector de los turismos, pero la empresa, que no se menciona por su nombre, sólo compra componentes a Bosch, no el sistema completo.
Mientras que Bosch, como se ha dicho, tiene los derechos exclusivos para la carretera, PowerCell vende su pila de combustible para otros segmentos. Por ejemplo, según un anuncio anterior, la empresa ha firmado un contrato con un "astillero europeo líder" no identificado para el desarrollo y suministro de un sistema marino de pila de combustible con una potencia total de aproximadamente 3 megavatios. El sistema se desarrollará y entregará en un plazo de tres años. El pedido asciende a 6,9 millones de euros para el desarrollo, la producción y la entrega del sistema.
Bosch ve un potencial a largo plazo en el negocio de la técnica móvil de pilas de combustible de miles de millones. Bosch ya dejó claro hace algún tiempo que, empezando por los vehículos industriales, en el futuro los accionamientos de pila de combustible de Bosch se utilizarían cada vez más en los turismos. Para ello, sin embargo, los costes de los sistemas de pilas de combustible tendrían que bajar paulatinamente. Según Bosch, la partida más importante es la pila, que supone hasta dos tercios de los costes totales. Según Bosch, gracias a la industrialización y a la difusión de la técnica en el mercado, se conseguirán economías de escala y se reducirán los costes, tal y como subrayó el año pasado el Dr. Stefan Hartung, miembro de la junta directiva de Bosch y presidente de la división Mobility Solutions. Sin embargo, para que esto ocurra los costes del hidrógeno también deben bajar, aunque el precio ("a menudo más de cinco euros por kg") tiende a disminuir a medida que aumenta la producción.
Bosch y PowerCell aportan a la cooperación sus conocimientos ya acumulados en este campo: PowerCell, una unidad de negocio escindida del Grupo Volvo en 2008 y con sede en Gotemburgo, ya construía pilas de combustible para su uso prototípico en camiones y automóviles antes de la cooperación. Por su parte, Bosch ya dispone de una amplia cartera de componentes de FC, como compresores de aire con electrónica de potencia o unidades de control con sensores.
Con información de Cora Werwitzke
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