Los propietarios del Mirai demandan a Toyota por su usabilidad
Los conductores afirman que las afirmaciones de Toyota de que "el repostaje del Mirai se realiza sin problemas" y es "comparable al repostaje con gasolina" no son ciertas. El número de estaciones de repostaje de hidrógeno es escaso y los precios del H2 son elevados, lo que hace que los coches de pila de combustible sean "inutilizables" para muchos conductores. Según Carscoops.com, el coste del hidrógeno casi se ha triplicado en los dos últimos años en EE.UU., pasando de $13/kg en 2022 a cerca de $36/kg en 2024.
Además, los conductores afirman que repostar su FCEV lleva horas, eso si encuentran una gasolinera en funcionamiento. Y eso no es todo. Los propietarios afirman que la autonomía realista del Mirai es sistemáticamente 100 millas (o 160 km) inferior a la prometida por Toyota.
Entonces, ¿por qué no comprar un coche nuevo? Eso también forma parte de la demanda colectiva contra el fabricante de automóviles. Porque, debido a todos estos problemas, un Mirai usado vale muy poco. Al parecer, después de cinco años, se vende por menos del 20% de su precio inicial.
En EE.UU., el Toyota Mirai ya se vende exclusivamente en California porque el Estado Dorado cuenta al menos con algunas estaciones de repostaje. Pero cada vez hay menos. En febrero, Shell anunció que va a cerrar todas sus estaciones de recarga de hidrógeno para automóviles en California con efecto inmediato, dejando a los conductores de Toyota Mirai, Hyundai Nexo y Honda Clarity Fuel Cell con siete estaciones menos (de un total de 55). Aunque California es uno de los pocos mercados para los vehículos impulsados por hidrógeno, sólo se matricularon 3.143 en 2023, menos que 1% de coches eléctricos de batería en el mismo periodo, según la Comisión de Energía de California.
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