El Estado francés y la industria forjan un pacto de producción de coches eléctricos

El gobierno francés ha concluido un acuerdo con la industria automovilística nacional para aumentar las ventas de vehículos eléctricos a 800.000 turismos y 100.000 vehículos comerciales eléctricos ligeros al año para 2027. El Estado promete seguir apoyando la compra y el alquiler de coches eléctricos.

Imagen: Stellantis

El pacto firmado recientemente entre el gobierno, los grupos empresariales franceses y los sindicatos prevé cuadruplicar las ventas de vehículos eléctricos hasta 800.000 al año en 2027. Además, está previsto multiplicar por seis las ventas de vehículos comerciales eléctricos ligeros hasta 100.000 al año. El año de referencia es 2022, con 200.000 y 16.500 coches eléctricos y vehículos comerciales eléctricos ligeros vendidos respectivamente.

Según los informes de las agencias, el llamado "acuerdo de estrategia sectorial" también estipula que deben instalarse 400.000 puntos de recarga a lo largo de las principales rutas de transporte y en las grandes ciudades para 2030 y 25.000 puntos de recarga rápida para finales de 2027. También se dice que el acuerdo contiene un capítulo sobre "salvaguarda de la soberanía", según el cual están previstas, entre otras cosas, pruebas de resistencia de las cadenas de suministro de materiales críticos.

Según BloombergAunque el Gobierno no ha mencionado una cantidad explícita para las nuevas subvenciones, ha prometido "seguir apoyando la compra y el alquiler de vehículos eléctricos". Reuters escribe que el Estado destina 1.500 millones de euros a apoyar la producción y la compra de vehículos eléctricos este año a través de diversos programas. Así lo "informó" el Ministerio de Finanzas, precisa la agencia de noticias.

El trasfondo del cierre de filas entre el gobierno y la industria es que Francia cree encontrarse en un umbral pionero. En palabras del ministro francés de Economía, Bruno Le Marie, suena así: "La elección que hay que hacer es si queremos ser un país de productores (de automóviles) o un país de consumidores. Hemos hecho la elección de ser un gran país productor de vehículos eléctricos". El desarrollo de la industria francesa del automóvil eléctrico es esencial para que el país se independice de los productores de petróleo y de los grandes exportadores de automóviles.

Después de que las ventas de vehículos chinos se dispararan el año pasado, el gobierno ya había reaccionado de forma poco convencional - y vinculó su bonificación medioambiental para coches eléctricos a las emisiones de CO2 de la producción de vehículos y baterías. Anteriormente, el "bonus écologique" se concedía por la compra de un coche totalmente eléctrico, independientemente del fabricante y del país de producción. Sin embargo, desde principios de año se tienen en cuenta diversos criterios medioambientales, como las características del propio modelo de vehículo, el peso, el origen y el impacto medioambiental de los materiales utilizados, la evaluación del ciclo de vida de la planta de montaje y las rutas de transporte hasta el punto de venta.

Es prácticamente imposible que los fabricantes chinos cumplan los criterios. No hay ni un solo coche eléctrico fabricado en China en la lista de vehículos elegibles publicado en diciembre. Sin embargo, alrededor de dos tercios de los vehículos eléctricos vendidos en Francia son subvencionables, incluidos muchos modelos del Grupo Stellantis, Renault y fabricantes alemanes. El Tesla Model Y de producción alemana también es elegible. Al mismo tiempo, Le Maire subraya que el Gobierno da la bienvenida a la apertura de plantas de fabricantes chinos como BYD en Francia: "BYD es bienvenida en Francia y la industria automovilística china es bienvenida en Francia", se le cita. Es probable que esta declaración también vaya dirigida a Xi Jinping, que se encuentra actualmente de visita de Estado en Francia.

Según informa Reuters, algo menos del 20% de los coches nuevos vendidos en Francia son actualmente eléctricos, pero sólo el 12% de estos coches eléctricos se fabrican en Francia. El presidente francés, Emmanuel Macron, ha puesto a los fabricantes de automóviles del país el objetivo de producir dos millones de vehículos eléctricos o híbridos para 2030. Le Maire ha reafirmado ahora este objetivo, a pesar de que en 2023 sólo se construyeron en Francia 1,5 millones de vehículos de todos los tipos de propulsión.

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