Nio inicia la producción en serie de su sistema de propulsión de 900 voltios

El fabricante chino de automóviles Nio ha iniciado la producción de su sistema de propulsión de 900 voltios. El sistema de propulsión eléctrica, denominado Thunder, se utilizará por primera vez en el nuevo modelo insignia de Nio, el ET9, el año que viene.

Imagen: Nio

El EV9 es una mezcla de SUV y berlina de lujo de 5,33 metros de longitud. El primer modelo basado en la plataforma de 900 voltios se entregará a partir del primer trimestre de 2025, pero ya se puede encargar por adelantado a precios que empiezan en 800.000 yuanes o unos 100.000 euros. Está equipada con una batería de 120 kWh fabricada con celdas redondas de desarrollo propio en formato 46105 con una densidad energética de 292 Wh/kg. Con la estación de carga correspondiente, la batería puede cargarse con 5C, es decir, 600 kW. Así, la recarga para una autonomía de 255 kilómetros (en CLTC) dura cinco minutos.

Nio confía en la tracción total para el próximo modelo superior. En el eje trasero se ha instalado un motor síncrono de imanes permanentes de 340 kW, mientras que en el delantero se utiliza un motor asíncrono de 180 kW. La potencia del sistema será de 520 kW. Al haberse aumentado el grado de integración de los propulsores eléctricos de 900 voltios en comparación con los anteriores EV de Nio, entre otras cosas, serán un 30% más ligeros y 280 milímetros más cortos que sus predecesores.

La reducción del espacio de instalación proporcionará más espacio en el interior, mientras que el menor peso debería reducir el consumo de energía, según Nio. Por ejemplo, el PSM del eje trasero sólo pesará 79 kilogramos y alcanzará una densidad de potencia de 4,3 kW/kg. Para el motor asíncrono, Nio especifica una densidad de potencia de 2,6 kW/kg, lo que corresponde a un peso de 69 kilogramos. Según Nio, se trata de la "densidad de potencia más alta del mundo entre los motores eléctricos asíncronos", algo que actualmente no puede verificarse.

La mayor potencia máxima de 340 kW en el eje trasero -una Nio ET5 actual con dos motores alcanza una potencia del sistema de 360 kW- será posible gracias a un sistema de refrigeración revisado para la unidad motriz. Como resultado, la potencia máxima continua del motor se incrementará en un 30%.

Tanto el PSM trasero como el ASM delantero están controlados por una nueva electrónica de potencia. Éstos se basan en semiconductores de carburo de silicio y alcanzan así una densidad de potencia de 1.315 kW/l, según Nio. El sistema está diseñado para más de 300.000 ciclos de potencia.

La noticia del inicio de la producción del accionamiento de 900 voltios llega al mismo tiempo que un aniversario. Nio ha producido hasta la fecha un total de un millón de accionamientos eléctricos.

carnewschina.com

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