Las conversaciones de Fisker con los principales fabricantes de automóviles han fracasado

La insolvencia de Fisker es cada vez más probable. Las conversaciones con un importante fabricante de automóviles sobre una inversión han fracasado, según ha anunciado Fisker en un anuncio en bolsa. Las acciones ya han sido suspendidas de cotización como medida de precaución.

Imagen: Fisker

El lunes, Fisker anunció que se habían cancelado las conversaciones con un fabricante de automóviles no identificado sobre una asociación estratégica. El socio potencial era supuestamente Nissan. No se conoce el motivo de la ruptura de las negociaciones, pero sí la consecuencia: el fin de las conversaciones ha llevado a la empresa a "buscar opciones estratégicas, incluidas reorganizaciones judiciales o extrajudiciales y transacciones en el mercado de capitales".

Ante el fracaso de la inversión, la Bolsa de Nueva York ha suspendido la cotización de las acciones de Fisker y planea retirar de la lista al fabricante de coches eléctricos debido al valor "inusualmente bajo" de sus acciones. Las acciones de Fisker habían cerrado a un precio de 0,13 dólares el viernes y cotizaban a 0,09 dólares el lunes antes de la paralización.

Como Reuters escribe, en caso de exclusión de bolsa, Fisker deberá ofrecer la recompra de sus bonos convertibles no garantizados de 2,50% con vencimiento en 2026 y se desencadenará un evento de impago para sus bonos convertibles garantizados senior con vencimiento en 2025. Sin financiación externa, que debería proceder, entre otros, de los socios de la industria automovilística, es muy poco probable que Fisker pueda financiar esta recompra. Así lo afirma también la propia empresa: "Actualmente no tenemos suficientes reservas de efectivo o fuentes de financiación suficientes para satisfacer todas las cantidades adeudadas en virtud de los Bonos de 2026 o los Bonos de 2025, y como resultado, tales acontecimientos podrían tener un efecto material adverso en nuestro negocio, resultados de operaciones y situación financiera", reza el comunicado.

Desde hace semanas se sabía que la situación financiera era extremadamente tensa. No sólo Fisker se quedan cortos de su objetivos de entrega originales para 2023, también cuestionó su propio futuro al presentar sus cifras financieras a principios de marzo. Una declaración de este tipo es obligatoria para las empresas estadounidenses que cotizan en bolsa si los recursos actuales son insuficientes para cubrir las operaciones de los próximos doce meses. Tras esta advertencia a los inversores, las empresas suelen tener aún tiempo para encontrar inversores y dar la vuelta a la situación.

En el caso de Fisker, sin embargo, esto es ahora menos probable. La posible asociación con un gran fabricante de automóviles, que también incluiría una inversión, se mencionó en la presentación del balance. Sin embargo, a mediados de mes se supo que Fisker también estaba prepararse para una posible insolvencia con la ayuda de abogados. Sin embargo, la mayor señal de alarma llegó unos días después, cuando se detuvo la producción del Océano en Magna, en Graz. Oficialmente, la pausa de seis semanas en la producción tenía como objetivo "igualar las existencias". Sin embargo, en vista de la situación financiera conocida, ya se temía entonces que Fisker no dispusiera de dinero suficiente para continuar con la fabricación por contrato. En Enerono se había construido ni un solo ejemplar del Ocean. Si se interrumpe la producción del único modelo y motor de ventas, se acentúa la gravedad de la situación.

El mercado bursátil estadounidense espera ahora con firmeza una insolvencia de Fisker, aunque sólo se especula sobre el momento en que se producirá. "No puedo precisar si será la semana que viene o el año que viene, pero es inevitable". Reuters cita Thomas Hayes, presidente del fondo de cobertura Great Hill Capital.

Fisker Inc. fue fundada en 2016 y salió a bolsa a través de una fusión SPAC, con una valoración de 2.900 millones de dólares. Fisker Inc. es la segunda empresa automovilística fundada por Henrik Fisker. La primera empresa, Fisker Automotive, había desarrollado una berlina con extensor de autonomía. Sin embargo, la empresa no sobrevivió a la crisis financiera de 2008 y fue declarada insolvente en 2013 a pesar de los millonarios préstamos del Gobierno estadounidense y de una venta a inversores.

reuters.com, sec.gov

1 Comentario

acerca de "Las conversaciones de Fisker con los principales fabricantes de automóviles han fracasado"
Bonaparte
27.03.2024 um 15:59
Una vez que lanzaron un coche llamado Pera se sabía cuál era la forma de las cosas por venir.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *