Wolfspeed y ZF construirán una planta de semiconductores de SiC en Alemania
La empresa estadounidense Wolfspeed quiere construir en el Sarre la mayor planta del mundo de semiconductores de carburo de silicio (SiC) para su uso, entre otros, en vehículos eléctricos. El proveedor automovilístico ZF también tomará una participación minoritaria en la fábrica.
Así lo informó la publicación alemana Handelsblatt con referencia a "círculos familiarizados con el proyecto". Wolfspeed construirá la fábrica de semiconductores SiC en el emplazamiento de una antigua central eléctrica de carbón en Ensdorf. La empresa, con sede en Carolina del Norte, tiene previsto iniciar la producción en serie dentro de cuatro años. Además, según el Handelsblatt, se construirá un centro de investigación en el que ZF tendrá una participación mayoritaria. Sin embargo, la realización del proyecto a gran escala depende de la promesa de subvenciones gubernamentales, prosigue el informe.
La decisión de Wolfspeed sobre la ubicación se debe en gran medida a su socio ZF. El proveedor automovilístico está presente en el Sarre desde hace décadas y, en consecuencia, tiene buenos contactos con los políticos del estado. En Noviembre de 2022, ZF también anunció su intención de convertir su planta de transmisiones de Saarbrücken en un emplazamiento líder en transmisiones puramente eléctricas y, en este contexto, invertir una suma de tres dígitos millones. Según el "Handelsblatt", como mayor empleador de la región, ZF también puede proporcionar el personal que se necesita urgentemente para la nueva fábrica.
Hasta ahora, Wolfspeed ha estado presente sobre todo en Norteamérica. La última fábrica construida allí costó unos 2.000 millones de dólares. Según la fuente mencionada, la fábrica de Sarre será aún más grande y, en consecuencia, más cara. Ya hay clientes de Europa: Los semiconductores SiC de Wolfspeed, por ejemplo, están siendo integrado por Mercedes-Benz en los accionamientos de futuras plataformas para coches eléctricos. Jaguar Land Rover también confiará en los semiconductores SiC de Wolfspeed en su próxima generación de coches eléctricos.
El mercado de semiconductores de SiC está actualmente en movimiento. En mediados de noviembre, el proveedor estadounidense BorgWarner adquirió una participación de 500 millones de dólares estadounidenses en Wolfspeed, asegurándose capacidades de producción de semiconductores de carburo de silicio por valor de hasta 650 millones de dólares estadounidenses al año. En 2017, un intento de adquisición de Wolfspeed por parte de Infineon fracasó sólo por el veto del gobierno estadounidense.
Es probable que Bosch esté siguiendo de cerca los desarrollos en Sarre en estos momentos. Junto con Denso de Japón, la empresa alemana es hasta ahora el único proveedor automovilístico con producción propia de chips. Bosch anunció hace poco que construiría innovadores módulos de potencia de SiC a nivel local en China en el futuro. En Alemania, la producción de semiconductores SiC a gran escala de Bosch se encuentra en Reutlingen.
Por último, una breve digresión sobre la importancia de los semiconductores de SiC en comparación con los chips de silicio: Los semiconductores de SiC tienen mayor conductividad y permiten frecuencias de conmutación más altas en comparación con los chips de silicio. Además, sólo se pierde la mitad de energía en forma de calor, lo que aumenta la autonomía de los coches eléctricos. Como se emite menos calor y los componentes de SiC también pueden funcionar a temperaturas más altas, el sistema de refrigeración de la electrónica de potencia puede ser más pequeño. Esto no sólo ahorra energía, sino que también puede reducir el peso y los costes gracias a los sistemas de refrigeración más compactos.
handelsblatt.com (en alemán)
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