H2FLY dirigirá el proyecto de aviación de hidrógeno HEAVEN
La empresa alemana H2FLY, especializada en el desarrollo de sistemas de pilas de combustible de hidrógeno para aviones, asume la gestión del proyecto HEAVEN. El proyecto pondrá a prueba el primer avión de pasajeros que vuele con hidrógeno líquido (LH2) en 2023.
El proyecto HEAVEN tiene la tarea de integrar pilas de combustible de alto rendimiento y criotecnología en un avión existente antes de que se realicen las pruebas en vuelo el próximo año. H2FLY, la empresa con sede en Stuttgart que asume ahora la dirección del proyecto, es responsable del sistema de pila de combustible, de la plataforma de integración "HY4" y de la arquitectura del sistema del avión (incluido el control de los sistemas de pila de combustible y depósito de LH2). Los otros socios que colaboran en el proyecto HEAVEN son Air Liquide Advanced Technologies, diseñador y proveedor de depósitos criogénicos, Pipistrel Vertical Solutions, que apoya la integración y las pruebas del tanque, y la DLR Centro Aeroespacial Alemán, que apoya el funcionamiento y las pruebas del combustible de alto rendimiento.
Según la empresa alemana de aviación del hidrógeno que dirige ahora el proyecto, HEAVEN sigue avanzando a buen ritmo en la integración del sistema de depósitos de hidrógeno líquido (LH2) y espera que esta fase se complete en los próximos meses. A principios del próximo año, H2 FLY afirma que dirigirá una amplia campaña de pruebas con el banco de pruebas "HY4". Se espera que el avión resultante se convierta en el primer avión de pasajeros que vuele con LH2.
Hasta verano de este año, el HY4 funcionó con hidrógeno comprimido gaseoso, tras lo cual los depósitos presurizados fueron sustituidos por depósitos para LH2. Se espera que la mayor densidad energética del LH2 duplique la autonomía del HY4, al igual que otros proyectos de aviación con hidrógeno, como los emprendidos por Airbus, que también trabaja actualmente en la criotecnología. Para que el hidrógeno se mantenga en estado líquido, debe enfriarse al menos a 253 grados Celsius bajo cero. Los depósitos criogénicos permiten almacenar LH2 que puede repostarse en estado líquido, lo que no sólo aumenta la densidad energética del hidrógeno sino que también facilita su manipulación en tierra.
H2FLY tiene ahora la tarea de gestionar también la colaboración entre los socios y la consecución de los objetivos del proyecto. Éstos se comunicarán a la Comisión Europea, que financia HEAVEN junto con los gobiernos nacionales de España, Francia, Alemania y Eslovenia en el marco del programa de investigación e innovación "Horizonte 2020".
El profesor Josef Kallo, cofundador y director general de H2FLY, declaró: "HEAVEN es un proyecto pionero creado para avanzar en los desarrollos fundamentales en el campo de la propulsión por hidrógeno y dar un paso de gigante hacia nuestro objetivo de una aviación con cero emisiones. Estamos encantados de asumir la gestión global del proyecto y de seguir ampliando la excelente cooperación con nuestros socios ya establecidos."
Fundada por cinco ingenieros del Centro Aeroespacial Alemán de Stuttgart y de la Universidad de Ulm, H2FLY trabaja para lanzar al mercado el primer sistema de propulsión cualificado para aviones totalmente eléctricos de hidrógeno. La empresa afirma que espera que los aviones eléctricos de hidrógeno puedan transportar 40 pasajeros en distancias de hasta 2.000 kilómetros (1.240 millas) en "sólo unos pocos años". Por referencias de distancia, esto cubre todas las distancias dentro de Europa, pero también permite vuelos desde Europa a sus continentes vecinos más próximos.
La tecnología de pilas de combustible de hidrógeno, tanto en forma gaseosa como líquida, es la única tecnología de emisiones cero existente para vuelos regionales ya que la propulsión puramente eléctrica por baterías no puede proporcionar una densidad energética suficiente para vuelos más largos.
0 Comentarios