El Consejo del Vehículo Eléctrico pide más VE en Australia
Más de 100 empresas que operan en Australia, entre ellas varios fabricantes de automóviles, han unido sus fuerzas para formar una alianza del sector privado en torno al vehículo eléctrico. El recién formado Consejo del Vehículo Eléctrico exige al gobierno australiano una sólida estrategia nacional en materia de vehículos eléctricos. El objetivo es conseguir que haya un millón de vehículos eléctricos en las carreteras australianas para 2027.
La convocatoria coincide con el final de las consultas sobre la Estrategia Nacional Australiana del Vehículo Eléctrico. El recién elegido gobierno laborista está examinando ahora las propuestas para la fase de consulta.
La alianza de más de 100 empresas pide ahora, entre otras cosas, normas estrictas de eficiencia de combustible como las de Nueva Zelanda, EE.UU. y Europa, inversiones en la fabricación de vehículos eléctricos a través de un plan de desarrollo de la industria automovilística, un enfoque coordinado para ampliar la red de recarga y el apoyo a más autobuses, camiones y vehículos comerciales eléctricos.
Algunos de los representantes destacados de la recién creada alianza del sector privado denominada Consejo del Vehículo Eléctrico son BMW, BYD, Sixt, Hertz, IKEA, Microsoft, Woolworths, la Asociación de la Industria de Vehículos Pesados y la Asociación Nacional de Carreteras y Automovilistas.
Tras las elecciones federales que se celebraron en mayo de este año, la gran mayoría de los australianos votaron a favor de una mayor protección del clima y ahora tienen un gobierno que apoya más los vehículos eléctricos.
"Tras años de inacción por parte de Canberra, la política australiana en materia de VE está lista para acelerarse y las empresas quieren asegurarse de que no perdemos el momento", añadió Behyad Jafari, director ejecutivo del Consejo del Vehículo Eléctrico. "Si acertamos con esta estrategia del VE, las oportunidades son enormes. Podríamos dar empleo a decenas de miles de australianos construyendo baterías, cargadores, coches, autobuses y camiones. Estaremos reduciendo la contaminación del transporte y haciendo lo que nos corresponde para combatir el cambio climático. Y estaremos reduciendo nuestra dependencia del petróleo extranjero utilizando energía australiana para movernos".
En noviembre de 2021, el ex primer ministro Scott Morrison lanzó el llamado Estrategia de combustibles y vehículos del futuro. El segunda ronda del Future Fuels Fund se puso en marcha en Australia en febrero bajo el antiguo gobierno. Se asignaron fondos a los operadores de flotas para que construyeran la infraestructura necesaria para integrar los vehículos de baterías e hidrógeno en sus flotas. Hasta ahora, no hay subvenciones para los clientes finales, aunque en junio recién pasado, el nuevo gobierno laborista lanzó el programa 'Descuento para coches eléctricos' que entró en vigor el 1 de julio. Esto simplemente abarató algunos modelos de importación al proporcionar exenciones a ciertos aranceles de importación e impuestos sobre los beneficios adicionales.
El antiguo gobierno federal australiano hizo relativamente poco para combatir el cambio climático aunque el país se vea especialmente afectado, como por ejemplo por los incendios forestales que asolaron el país en 2019. En agosto, bajo el nuevo gobierno dirigido por el Partido Laborista, la Cámara de Representantes y el Senado aprobaron un histórico proyecto de ley sobre el clima, según el cual las emisiones de CO2 en el país deben reducirse en un 43% para 2030.
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