El Instituto Fraunhofer estudia el reciclaje de imanes
En un proyecto llamado FUNMAG, investigadores del Fraunhofer IWKS quieren demostrar que el reciclaje comercial de imanes merece la pena a gran escala. Financiado por la Hessen Agentur, el equipo trabaja para demostrar que los motores eléctricos con imanes viejos reciclados pueden ofrecer el mismo rendimiento que con sus imanes nuevos originales.
Según el instituto de investigación Fraunhofer Gesellschaft, a pesar de su costosa y a veces problemática producción, los imanes suelen acabar en el desguace al final de su vida útil, donde se funden junto con la chatarra de acero. Sin embargo, ahora existen métodos probados para reciclar imanes. Con su proyecto "Reciclaje de imanes funcionales para una movilidad eléctrica sostenible" (FUNMAG), los científicos se propusieron cerrar la brecha entre la teoría y la práctica.
Para los experimentos, el equipo adquirió una bicicleta eléctrica, un patinete eléctrico y un hoverboard. "En primer lugar, examinamos las características de los motores eléctricos de cada uno de los nuevos vehículos para determinar los datos clave relevantes que utilizaríamos después para comparar la potencia de los motores con imanes reciclados", explica Konrad Opelt, director del proyecto.
Era importante representar casos realistas: "Si los chatarreros deciden separar los imanes de los motores que se han desechado, por lo general se tratará de una auténtica bolsa mixta de varios imanes, de cuyas características precisas nadie está seguro", continúa Opelt. "Por lo tanto, nuestro objetivo era demostrar que el proceso de reciclado también puede hacer frente a materiales base indefinidos, con estas incógnitas en el proceso. Y nadie lo había hecho antes que nosotros".
En comparación con la producción de un imán nuevo, en el caso de los imanes viejos reciclados se omiten algunos pasos de producción, como la fusión del material de partida a unos 1400 grados. Esto también aliviaría la carga que supone la extracción de las materias primas, perjudicial para el medio ambiente. Los imanes viejos se pondrían en contacto con una atmósfera de hidrógeno y después pasarían por los pasos habituales del proceso. Miles de imanes podrían procesarse simultáneamente en el proceso de reciclaje, escribe el instituto. El rendimiento de los imanes reciclados puede determinarse en el producto acabado o incluso en la fase de polvo.
Actualmente, los científicos siguen optimizando el proceso de preparación durante el reciclado. No obstante, Opelt confía en que los imanes reciclados puedan utilizarse pronto en motores eléctricos.
De las investigaciones se derivará una cartera de propiedades que proporcionará a los futuros usuarios recomendaciones sobre cómo puede modificarse el proceso de reciclado de forma que se alcancen las propiedades deseadas para los imanes, en función de la composición inicial.
Con información de Domenico Sciurti, Alemania.
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