La Investigación Hindenburg apunta a Mullen
Hindenburg Research vuelve a lanzar graves acusaciones de fraude contra una start-up de coches eléctricos. Esta vez, la empresa estadounidense Mullen Automotive ha sido el objetivo del vendedor en corto. Hindenburg acusa a Mullen de haber engañado a sus inversores.
Esto se aplica tanto a la recientemente denunciada por Mullen avances en el desarrollo de las pilas de estado sólido y a las reclamaciones de pedidos recibidos para sus vehículos. Mullen sólo había invertido unos tres millones de dólares en investigación y desarrollo en 2021 - los fabricantes de automóviles y de baterías emplean muchas veces esa cantidad para conseguir que las baterías de estado sólido estén listas para la producción. A pesar de la mininversión, Mullen afirma poder dar el paso en 2025.
Además, según la investigación de Hindenburg, una prueba de batería publicada recientemente era probablemente sólo una repetición de una prueba de 2020 y, por tanto, técnicamente carente de sentido. No obstante, la publicación ha hecho que el precio de las acciones (Mullen cotiza en bolsa desde finales de 2021 a través de la fusión SPAC) suba un 145%. Un alto ejecutivo supuestamente a cargo de una empresa conjunta de baterías declaró a Hindenburg que la empresa conjunta no existía, y calificó al director general de Mullen, David Michery, de "charlatán" y "buscavidas".
Además, Mullen había anunciado recientemente por sorpresa que entregaría dos modelos de furgoneta eléctrica a un importante cliente estadounidense en el plazo de unos meses, al parecer una empresa del Fortune 500. Sin embargo, según Hindenburg, los vehículos no son de desarrollo propio de Mullen, como se había afirmado, sino vehículos fabricados en China con el logotipo de Mullen. Se dice que los registros de importación muestran que la empresa importó recientemente dos vehículos de China, uno de cada modelo. Al parecer, Mullen no dispone de certificados EPA para las furgonetas. Pero eso es un requisito para las ventas - excepto que todo el proceso puede llevar de doce a 18 meses.
Tampoco, según el presidente de la Cámara de Comercio, se ha producido ninguna contratación significativa en la planta de la empresa. Se dice que las supuestas imágenes de la planta de fabricación publicadas por Mullen en su sitio web son fotos de archivo, concretamente de Adobe Stock Images, según Hindenburg Research.
Mullen ha tenido una historia accidentada, cambiando completamente de estrategia varias veces. Primero querían construir una berlina eléctrica, después, en 2018, fabricar el deportivo eléctrico chino Qiantu K50 en Estados Unidos. Sólo dos años después, un SUV eléctrico llamado MX-05 se planeó de repente, lo que parecía concretarse en el transcurso de 2021.
Antes de eso, Hindenburg Research ha atacado a las start-ups de vehículos eléctricos Lordstown Motors, Nikola Motor y Kandi.
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