El consejo de supervisión de Daimler aprueba inversiones multimillonarias
El consejo de supervisión de Daimler AG ha aprobado el plan de negocio de Mercedes-Benz para los años 2022 a 2026 y ha confirmado así la planificación estratégica, como la transformación a propulsores totalmente eléctricos.
Desde la escisión de Daimler Truck AG el 1 de diciembre, Daimler ha estado formada únicamente por las divisiones Mercedes-Benz Turismos y Mercedes-Benz Furgonetas. Daimler afirmó que a partir de ahora se centrará "consecuentemente" en las oportunidades de crecimiento y rentabilidad del negocio de turismos y furgonetas, con el objetivo de alcanzar "el liderazgo en propulsión eléctrica y software para vehículos".
En los años 2022 a 2026, Mercedes quiere invertir más de 60.000 millones de euros para la "transformación hacia un futuro sin emisiones e impulsado por software", este plan ha sido confirmado ahora por el consejo de supervisión. El porcentaje de gastos en investigación y desarrollo aumentará ligeramente, mientras que Daimler seguirá reduciendo las inversiones en inmovilizado material.
Sin embargo, el gasto en investigación y desarrollo también está sujeto a directrices estrictas: Las inversiones totales deben reducirse en un 20% para 2025 en comparación con 2019, y deben reducirse aún más en una cantidad aún no revelada después de esa fecha. Sin embargo, dentro del menguante presupuesto de inversión, las prioridades están cambiando.
Para alcanzar el objetivo de ahorro de inversiones, la "clave reside en la rigurosa priorización de las inversiones futuras - ante todo, el enfoque en la electromovilidad", informa el grupo. Se espera que otros dos factores contribuyan a ello: en primer lugar, la empresa afirma que espera que "las plataformas de baterías estandarizadas y las arquitecturas de vehículos escalables -junto con los avances en la tecnología de las baterías- contribuyan a reducir los costes variables de los vehículos eléctricos de batería". Además, la parte de los costes de las baterías en el vehículo "se espera que disminuya significativamente en esta década".
Además del descenso de los gastos de capital, también se confirmó la línea de situar cada vez más los vehículos en el extremo superior de los respectivos segmentos. En otras palabras, las ventas netas por vehículo van a aumentar y se definieron como una "palanca importante" para alcanzar los objetivos de margen. Además, se introducirá paso a paso "un modelo de venta directa", con el que Daimler quiere conseguir precios fijos sin batallas de descuentos en los concesionarios. Los servicios digitales también contribuirán cada vez más a los ingresos.
"Nuestro objetivo es ser el líder tecnológico en el segmento del lujo automovilístico, así como en el de las furgonetas premium. Para ello, seguimos comprometidos con nuestros ambiciosos objetivos de márgenes", afirma Ola Källenius, consejero delegado de Daimler. "Mercedes-Benz tiene todo lo necesario para lograrlo: un rumbo estratégico claro, un equipo altamente cualificado y motivado, y el firme apoyo de todo el Consejo de Supervisión".
Mercedes-Benz ya había esbozado su estrategia futura en actualizaciones de estrategia en Octubre de 2020 y Julio de 2021: A partir de 2025, todas las plataformas de vehículos de nuevo lanzamiento serán puramente eléctricas. Para finales de la década, Mercedes-Benz quiere ser puramente eléctrica - pero con la restricción "siempre que las condiciones del mercado lo permitan".
Los primeros pasos concretos de esta nueva orientación coherente ya se han hecho patentes desde entonces: a finales de septiembre, Mercedes se unió a la empresa conjunta de pilas ACC (de Stellantis y Total), y Stellantis y Mercedes también invirtió esta misma semana en el desarrollador de baterías sólidas Factorial. Daimler planea un total de ocho fábricas de células de baterías junto con socios para cubrir sus propias necesidades.
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