El gobierno de EE.UU. mantendrá las subvenciones a los sindicatos

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Imagen: EVgo

El gobierno estadounidense mantiene su plan de aumentar a $12.500 la desgravación fiscal para los vehículos eléctricos ensamblados por trabajadores sindicados en Estados Unidos. El aumento forma parte del plan revisado "Reconstruir mejor" presentado ahora. En el extranjero existe oposición a la medida propuesta.

"Reconstruir mejor" es un paquete social masivo que los demócratas acordaron tras meses de negociaciones. El presidente Biden dice estar "seguro" de que el paquete "puede ser aprobado por ambas cámaras del Congreso". Las negociaciones con los republicanos no han hecho más que empezar.

El aumento del crédito fiscal es una de las medidas que se incluyeron en el paquete. En concreto, el crédito se incrementará hasta $12.500 sólo para los vehículos eléctricos ensamblados por trabajadores sindicados en EE UU.. Actualmente, el máximo es de $7.500. Aún no se conocen los detalles. Mientras tanto, se hablaba de que la nueva norma sólo se aplicaría a los vehículos hasta un precio de 80.000 dólares y que también podría pagarse de forma fraccionada (7.500 dólares como base y luego más 2.500 dólares por el ensamblaje en EE.UU. y otros 2.500 dólares por una mano de obra sindicada). No está claro si estas condiciones marginales se incluyeron también en el proyecto de ley.

Hasta ahora, la Casa Blanca sólo ha dicho que "el crédito fiscal para vehículos eléctricos reducirá el coste de un vehículo eléctrico fabricado en Estados Unidos con materiales estadounidenses y mano de obra sindicada en $12.500 para una familia de clase media".

A principios de verano, esta medida ya se había propuesto como parte de un proyecto de ley denominado "Energía limpia para América". Actualmente, el crédito fiscal máximo para los vehículos eléctricos en Estados Unidos es de $7.500. Esta cantidad no está vinculada a ningún tope de precios de modelos o de ensamblaje en EE.UU., pero se sabe que caduca para los fabricantes de automóviles una vez que alcanzan el límite de 200.000 ventas de vehículos eléctricos, lo que ha sido durante mucho tiempo el caso de General Motors y Tesla. La nueva ley eliminaría esta limitación existente.

Los sindicatos aplaudieron la propuesta en mayo. Sin embargo, ahora que el proyecto está tomando forma, también existe oposición al aumento proteccionista de la desgravación fiscal, y ésta se agita en una serie de países con fuertes industrias automovilísticas como Alemania, Japón y Corea del Sur, entre otros. Estas naciones se ven claramente perjudicadas por la propuesta.

En una carta conjunta dirigida a los principales líderes del Congreso estadounidense, los embajadores de los países firmantes escriben, entre otras cosas: "Limitar la elegibilidad para el crédito a los vehículos basados en su ensamblaje nacional estadounidense y su contenido local es incoherente con los compromisos adquiridos por EE.UU. en virtud de los acuerdos multilaterales de la OMC".

cnet.comwhitehouse.govreuters.com (respuesta internacional)

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