El cable de carga ligero de Bosch elimina el "ladrillo eléctrico
Bosch, en la actual feria IAA, tiene expuesto un nuevo cable de carga que no necesita caja de control en el cable y, según el proveedor, con menos de tres kilogramos, pesa un buen 40% menos que los cables de carga convencionales.
Ese menor peso se debe a que Bosch ha integrado la tecnología de control y seguridad no en una caja conocida coloquialmente en Alemania como "ladrillo de carga", sino dentro de los enchufes. El dispositivo inteligente está hecho para la carga en una toma de corriente de 230 voltios y permite una carga en corriente alterna de hasta 22 kilovatios.
La tecnología integrada en cada enchufe significa que el conector de tipo 2 en el extremo del cable del vehículo contiene los componentes para controlar y supervisar la potencia de carga. El enchufe doméstico con adaptador alberga el control de la temperatura y un dispositivo de corriente residual en el otro extremo.
Según Bosch, esto protege de sobrecargas o sobrecalentamientos incluso durante la recarga en una toma de corriente doméstica con una potencia de carga de hasta 2,3 kilovatios. En caso necesario, la tecnología de seguridad desactiva el cable antes de que la situación se vuelva crítica, añade el proveedor.
Los desarrolladores de Bosch habían "reducido considerablemente el tamaño de los componentes electrónicos" en comparación con las aplicaciones anteriores en cajas de control para integrar la tecnología de control y seguridad en los conectores compactos del cable. Además, se beneficiaron de los esfuerzos de miniaturización en curso en toda la corporación Bosch, lo que ayudó a los ingenieros a llevar el nuevo cable de carga a la madurez del mercado en sólo 18 meses.
Gracias a los adaptadores de Bosch para enchufes de tipo 2 y domésticos, los conductores ya no necesitan un segundo cable para cargar los coches eléctricos en la carretera. Así, cuando se está en casa, tampoco se necesita ya una caja de pared. "Esto es lo que quieren los clientes", dice Bosch citando la encuesta NewMotion EV 2020, según la cual en Europa, el 84% de los conductores de coches eléctricos recargan su vehículo en casa por la tarde o por la noche.
El Dr. Uwe Gackstatter, presidente de Bosch Powertrain Solutions, dijo que quiere que el nuevo cable de carga se convierta en "equipamiento estándar de los vehículos eléctricos". Bosch espera empezar a vender el cable a los fabricantes de vehículos y a los conductores a mediados de 2022.
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