BAM Infra convierte y explota la apisonadora eléctrica
BAM Infra Nederland ha desarrollado la primera apisonadora puramente eléctrica del mundo y la ha puesto en funcionamiento. La máquina para trabajos pesados se convirtió de diesel a propulsión eléctrica en un periodo de un año y medio.
El apisonador eléctrico de la empresa constructora holandesa se utilizó por primera vez hace unos días en el marco de un proyecto en Almere (Países Bajos). La empresa afirma que una carga completa de la batería mantiene el rodillo eléctrico en funcionamiento durante ocho horas, mientras que la recarga tarda entre tres y cinco horas.
Cuando la necesidad es la madre de todos los inventos: La idea de reequipar una apisonadora surgió ante la falta de otras opciones en el mercado. Dado que no se disponía de apisonadoras eléctricas, los ingenieros de BAM Infra reconvirtieron un modelo diésel antiguo que tenía que someterse a una revisión general a intervalos regulares. Según la empresa holandesa, las apisonadoras son especialmente adecuadas para la electrificación, porque no requieren un gran alcance y, a diferencia de otros equipos de construcción, "sólo" necesitan energía para la conducción y la dirección y no para tareas de alto consumo energético como los trabajos de excavación.
El rodillo transformado funciona ahora sin emisiones y es considerablemente más silencioso. La empresa calcula que el accionamiento eléctrico ahorra 73 litros de combustible y unos 236 kilogramos de CO2 al día. El éxito de la conversión también anima a la empresa holandesa a fijarse más objetivos: BAM Infra afirma que el rodillo eléctrico es sólo el primer paso en el desarrollo de un tren de construcción de carreteras completamente libre de emisiones. Además de la propulsión eléctrica, la empresa afirma que también podría contemplarse el uso de pilas de combustible de hidrógeno para éste y otros vehículos pesados.
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