ARTEMYS investiga la producción de pilas de estado sólido
En el proyecto de investigación ARTEMYS, financiado por el gobierno alemán, institutos de investigación y socios industriales trabajan en el desarrollo de materiales y tecnologías de producción para baterías de estado sólido. La nueva batería también debería poder prescindir de los componentes poliméricos.
En el proyecto se están desarrollando tecnologías de proceso adecuadas para producir, entre otras cosas, baterías de estado sólido totalmente cerámicas. Fraunhofer IKTS es uno de los institutos de investigación que participan en Artemys. Entre los socios industriales del proyecto figuran corporaciones de renombre internacional como BMW, BASF y Thyssenkrupp, pero también empresas más pequeñas como Rehm Thermal Systems de Blaubeuren-Seißen.
En la batería de estado sólido totalmente cerámica en la que se está trabajando, tanto los cátodos como el electrolito están formados por materiales oxídicos o sulfídicos desarrollados por los socios del proyecto. Eso significa que estas baterías tienen la doble ventaja de no necesitar componentes líquidos ni poliméricos. Los equipos de investigadores planean utilizar cátodos compuestos en los que los materiales activos se mezclen con electrolitos sólidos que funcionen como separadores. Rehm Thermal Systems está trabajando en "soluciones de producción escalables para el secado y la sinterización de cátodos de óxido compuestos y separadores de electrolitos sólidos".
Rehm Thermal Systems tiene experiencia en procesos de secado para diversas aplicaciones industriales, pero también en sistemas de recubrimiento. Ambos se utilizan ya en baterías de iones de litio con electrolito líquido, pero también pueden emplearse para secar las láminas de los electrodos en el proyecto ARTEMYS. El denominado "sistema de secado de bobina a bobina RDS Battery" puede regular la temperatura de secado mediante radiación infrarroja, convección o una combinación de ambas. Además, los sistemas de recubrimiento de Rehm se utilizarán para el pegado y recubrimiento en la construcción de sistemas de baterías y electrónica de potencia.
Los investigadores asociados esperan que las baterías de estado sólido proporcionen una mayor densidad energética, tiempos de carga más cortos, una vida útil más larga, mejores propiedades de seguridad y una producción respetuosa con el medio ambiente y que ahorre recursos. Para los vehículos, las baterías de estado sólido pueden convertirse en la próxima generación de baterías de iones de litio, sin electrolitos líquidos ni componentes poliméricos.
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