EE.UU. anuncia una prórroga retroactiva de las subvenciones
Un nuevo proyecto de ley de gasto estadounidense incluye la prórroga retroactiva de los créditos fiscales para la instalación de cargadores domésticos de vehículos eléctricos, motocicletas eléctricas y vehículos de pila de combustible. Anteriormente, los créditos se habían prorrogado hasta 2017, y ahora se han ampliado hasta 2020.
Ahora, los contribuyentes estadounidenses pueden optar a un reembolso de 30% (con un límite de $1.000) por los costes de instalación de cargadores de vehículos eléctricos, a un crédito de 10% (hasta $2.500) por los vehículos eléctricos de 2 ó 3 ruedas, como las motocicletas eléctricas, y a un crédito de $4.000 por la compra de un vehículo nuevo de pila de combustible.
La subvención retroactiva de los créditos fiscales se produjo inicialmente porque los clientes no conocían el programa en ese momento. Ahora los créditos fiscales se han ampliado retrocediendo dos años, hasta 2017, así como hacia adelante, hasta 2020. La prórroga de los créditos se hizo torpemente en el pasado, ya que el periodo de solicitud en un momento dado sólo abarcaba cinco días, y la información sólo se difundió después de los hechos. Esto significa que la mayoría de las personas que se han beneficiado de los créditos no tenían previsto hacerlo, y las que contaban con ellos no han podido hacerlo.
Se habló de ampliación de los créditos fiscales para vehículos eléctricos más allá del límite actual de 200.000 vehículos para los fabricantes. Una prórroga habría beneficiado a Tesla y GM, que hace tiempo que superaron esta cifra. Sin embargo, la prórroga fue cortada de raíz, al parecer con la intervención directa de la Casa Blanca. En efecto, esto significa que los fabricantes de automóviles procedentes de fuera de EE.UU. tienen una clara ventaja sobre las marcas estadounidenses Tesla y GM, ya que otros fabricantes aún no han alcanzado la marca de los 200.000 vehículos.
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