Cataluña introduce un impuesto sobre el carbono para los vehículos contaminantes
El gobierno regional catalán está a punto de introducir un impuesto sobre el carbono para coches, furgonetas y motocicletas. Cataluña será así la primera región de España en pedir que paguen los propietarios de vehículos perjudiciales para el clima. El impuesto entrará en vigor con carácter retroactivo ya en 2019.
Así, Cataluña quiere recaudar el impuesto sobre el carbono para 2019 por primera vez en noviembre de 2020. Entonces se aplicará inicialmente a los vehículos que emitan 120 gramos de CO2 por kilómetro o más. Los vehículos que emitan más de 95 gramos de CO2 por kilómetro serán entonces gravados en 2020. En la práctica, los propietarios de un Porsche Cayenne con unas emisiones de CO2 de 265 g/km, por ejemplo, tendrán que pagar un impuesto de 127 euros para 2019 y de 176 euros para el año siguiente.
Los coches eléctricos están, por supuesto, exentos de este impuesto. De hecho, los vehículos eléctricos están exentos de peaje en Cataluña desde 2015 y ya disfrutan de otros privilegios como el aparcamiento gratuito o el acceso a los carriles bus.
Con la entrada en vigor del nuevo impuesto sobre el carbono, el gobierno espera añadir unos 150 millones de euros anuales a sus presupuestos. Afectará a 3,6 millones de coches y furgonetas y a cerca de 500.000 motocicletas, estas últimas a partir de 2021. La recaudación del impuesto se destinará a un fondo contra el cambio climático relacionado con el patrimonio natural y la biodiversidad.
El ejecutivo catalán ha aprobado el proyecto de ley con algunas modificaciones en cuanto a la legalidad y ha anunciado que lo tramitará en el Parlament por la vía de urgencia para que se haga efectivo antes de fin de año.
Cataluña forma parte del Iniciativa C40 por la red internacional Climate Group. La iniciativa pretende acelerar el despliegue de vehículos eléctricos en todo el mundo.
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