Tesla estudia implantar electrodos secos Maxwell
Hace unos días Tesla anunció la adquisición de Maxwell Technologies. Lo que pretende conseguir el fabricante de coches eléctricos se desprende ahora de nuevos informes y de un documento publicado por Maxwell en 2018 sobre su tecnología patentada de electrodos secos.
El adquisición del especialista en almacenamiento de energía con sede en San Diego costó a Tesla más de $200 millones en acciones. Ahora está más claro lo que hay detrás: al parecer, la empresa espera utilizar Maxwell para crear una nueva generación de baterías con mayor rendimiento y longevidad, tiempos de carga más cortos y precios más bajos.
Antecedentes: Maxwell no sólo produce supercondensadores y ultracondensadores, que actualmente se están instalando en coches híbridos para los sistemas de frenado regenerativo. La empresa también está trabajando en los llamados "electrodos secos", que no requieren disolventes y están diseñados para mejorar significativamente el rendimiento de las células de iones de litio y reducir los costes de producción. Los directivos de Maxwell dijeron a los inversores en enero que esperaban alianzas estratégicas en torno a la nueva tecnología de electrodos en un plazo de seis meses. Los resultados hablan por sí solos: Tesla ha dado el golpe en muy poco tiempo.
Sin embargo, la nueva tecnología aún no está lista para la producción en serie, aunque Maxwell afirma que un OEM y un proveedor ya están realizando pruebas. Originalmente, el lanzamiento al mercado de los electrodos secos estaba previsto para 2022. Bajo el paraguas de Tesla, es probable que se vuelva a planificar el calendario. Tampoco está claro cómo tratará Maxwell con los actuales compradores de sus condensadores, entre ellos Geely, GM, Lamborghini y PSA. Recordemos la adquisición de Grohmann: el fabricante alemán de plantas se deshizo de todos los clientes externos en pocos meses.
Se sabe que las nuevas tecnologías de baterías son la clave del éxito de Tesla. Durante años, la empresa ha intentado mantener bajos sus costes de fabricación. Los bajos costes de las células se consideran la ventaja competitiva más consistente de Tesla frente a sus competidores. El consejero delegado, Elon Musk, no se cansa de repetirlo. El ejemplo más reciente es el siguiente comentario sobre las últimas cifras de la empresa: En términos de producción de baterías, Tesla tiene los "mejores costes del mundo".
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