Mercedes se aventura en los vehículos eléctricos de pila de combustible

Mercedes aplica por primera vez en la vida real su tecnología de pila de combustible, ya que el GLC F-Cell está de camino a Japón y Alemania. Debido al elevado precio del híbrido enchufable que combina la energía del hidrógeno y la de la batería eléctrica, sólo algunos clientes seleccionados obtendrán los coches a cambio de una cuota. Sin embargo, éste es sólo el comienzo de una gama de FCEV que Daimler planea construir en torno a un nuevo sistema modular.

Por el momento, Mercedes pretende fabricar no más de cuatro GLC F-Cell. Los clientes elegidos para probar el plug-in antes de su lanzamiento al mercado en 2022, deberán pagar una cuota mensual de 799 euros.

Es evidente que este último modelo aún está en fase de desarrollo. Y, de hecho, Mercedes esconde un comodín en la manga: un sistema modular de pila de combustible diseñado para ser utilizado en varios tipos de vehículos. Jochen Hermann, jefe de desarrollo de accionamientos eléctricos de Daimler dijo a Automobilwoche esperar toda una gama de vehículos impulsados por hidrógeno a partir de 2022. Hasta entonces, la escalabilidad y el coste, obviamente, están en lo más alto de la agenda de los desarrolladores. Un primer contendiente para el sistema de pila de combustible de Mercedes es el autobús urbano eCitaro, añadió Hermman.

Así que, por ahora, el GLC F-Cell seguirá siendo una rara avis en las carreteras, incluso en los mercados de pruebas de Alemania y Japón. La razón por la que Daimler optó por estos países para empezar es fácil de adivinar. Japón es el mercado más desarrollado en lo que respecta al hidrógeno y los FCEV gracias al Mirai de Toyota. En el caso de Alemania, se trata simplemente del mercado de origen del fabricante de automóviles.

automobilwoche.de (paywall, en alemán)